Tikiri, una elefanta de 70 años que iba a desfilar en un festival budista en Sri Lanka y cuyo estado de salud indignó en las redes sociales, falleció la semana pasada. El gobierno ha pedido que se le haga una autopsia al animal, una elefanta asiática domesticada que falleció en la ciudad de Kegalle, a 80 kilómetros de Colombo, la capital del país. La extrema debilidad del animal, prácticamente en los huesos, había creado una enorme polémica tanto en el país como en las redes sociales de todo el mundo
Tikiri fue víctima de maltrato. «Estaba gravemente desnutrida». » El animal fue confiscado el mes pasado, cuando iba a participar en el conocido desfile anual en el Templo del Diente, en la ciudad de Kandy, después de que las imágenes de Tikiri desataran una polémica en las redes sociales. El desfile habría obligado a la elefanta a caminar varios kilómetros llevando un pesado atuendo, entre humo, petardos y multitudes.
Lek Chailert, el fundador de Save Elephant Foundation, explicó en las redes sociales que los espectadores no son conscientes de la debilidad de Tikiri provocada por el pesado ropaje con el que iba a desfilar. Tras el escándalo, el ministro de la Fauna, John Amaratunga, ha pedido una investigación.
Otro caso más de maltrato, explotación y esclavitud.
Descansa en paz.
