La Cadena Ser ha decidido cerrar el último clásico de la información taurina, un referente durante casi medio siglo. Manolo Molés, su voz, presentador y director, decía adiós desde Cali, donde retransmite la feria para Radio Caracol.
La desaparición del programa “Los Toros” es una buena noticia ya que poco a poco se nota el poco interés que hay hacia la tauromaquia, sin presencia ya en las parrillas de las radios más allá de la residual supervivencia del programa ‘Clarín’ en RNE.
Según las encuestas publicadas en todos los medios de comunicación, más del 70% de los españoles no apoya ni se identifica con las corridas de toros. Se va notando el cambio y eso es muy importante.
La tauromaquia vive de subvenciones públicas: más de 500 millones de euros al año, no sobreviviría sin el bolsillo de los contribuyentes.
Lo llaman “tradición” la tradición no es garantía de ética. Sabemos de tradiciones en todo el mundo que han debido y deben ser eliminadas, porque conllevan víctimas. Si las tradiciones se hubieran mantenido siempre intactas, la humanidad nunca hubiese evolucionado.
En febrero de 2018 El Comité de los Derechos del Niño de la ONU, instó al gobierno de España a alejar a los niños de las corridas de toros y de cualquier espectáculo taurino por la violencia que tiene y por el daño que les puede causar ver esas imágenes.
La Fiesta de los Toros ya está declarada BIC por la Comunidad de Madrid como Hecho Cultural, que es el tipo empleado para el patrimonio inmaterial.
Estamos en contra de la tauromaquia y, en particular, de su declaración como bien de interés cultural. Nunca el maltrato, la tortura y la muerte de un animal puede considerarse bien de interés cultural, PORQUE NO LO ES.
TAUROMAQUIA ES VIOLENCIA.
