España: el imperio de la barbarie

ANDA, lleva muchos años luchando contra todos los festejos que utilizan animales. Nos hemos desplazado varias veces a muchos pueblos de España para poder ver esos espectáculos tan repugnantes, como los toros de fuego o “embolados” de Levante, el Toro de la Vega que después de muchos años y muchas gestiones a todos los niveles se consiguió que dejaran de matarlo a lanzazos (ya no se le hiere ni molesta y al final es llevado al matadero para su posterior sacrificio), el que se asaetaba con dardos durante horas en Coria, los gansos y gallos a los que se arrancaba la cabeza (ahora los cuelgan ya muertos lo que no deja de ser aberrante), la cabra que tiraban desde un campanario y tantos otros por la mayoría de los pueblos que no podríamos citarlos a todos. Ha sido una lucha de muchos, muchos años y que todavía no ha terminado, cuando ANDA era la única asociación que informaba en la prensa sobre lo que ocurría en las fiestas populares y organizaba campañas y manifestaciones. Aunque se ha avanzado mucho y se ha conseguido el rechazo de la mayoría de la sociedad, lo que nos hace esperar que esta barbarie tiene los días contados, aún queda mucho por hacer y afortunadamente han surgido nuevos grupos y asociaciones muy mentalizadas que se han unido a la lucha.

El próximo mes se celebrará de nuevo el “Toro Jubilo”  en Medinaceli, (Soria).

Hemos ido varias veces a Medinaceli donde pudimos presenciar directamente en qué consistía este  festejo tan repugnante y también fue ANDA quien denunció esta atrocidad. En este caso se trataba del llamado “Toro Jubilo” de Medinaceli, se le embadurna de barro al animal y se le coloca en la cornamenta unas sobreastas de hierro “gamella” que terminan en dos bolas preparadas con azufre, estopa y aguarrás a las que se prende fuego.

A estas personas les resulta muy divertido y les hace sentirse muy orgullosos de su magnífica tradición. Lo siguen defendiendo todos los del pueblo como si de algo especial se tratara, aludiendo a hechos medievales que ya a nadie importan, excepto a aquellos que no han evolucionado y cuya cultura y educación están todavía ancladas en tiempos remotos. Si resultaban patéticos los vecinos de Medinaceli intentando justificar tal barbarie, más lastimoso era ver al pobre animal arrastrado con una soga, atado a un poste a la fuerza, y, finalmente, portando enloquecido las antorchas encendidas. En una palabra: espeluznante y vergonzoso.

La publicación por ANDA de reportajes con fotos en varios periódicos extranjeros causó un gran escándalo internacional que incluso motivó una discusión a nivel de comisión en el Parlamento Europeo.

Unos años más tarde, en 2002 fue declarado como Espectáculo Taurino Tradicional de Interés Turístico Regional por la Junta de Castilla y León. VERGONZOSO.

Siempre hemos pensado que tantos espectáculos repugnantes presenciados y grabados, habrán valido el esfuerzo y han valido, para que sigamos luchando por los que no tienen voz.

Algún día conseguiremos que se prohíba la utilización de animales como objeto de diversión.