La Comunidad de Madrid reafirmó el mes pasado su “apoyo inequívoco” a la tauromaquia, declarada Bien de Interés Cultural por parte de la Comunidad. Así lo puso de manifiesto el consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno regional, Enrique López.
La Fiesta del Toro 2021-2022, para la que el Gobierno regional ha destinado 900.000 euros, consta de 18 festejos taurinos celebrados en municipios de menos de 8.000 habitantes de la región a partir del mes de agosto y hasta septiembre.
La oposición ciudadana a las subvenciones públicas a la tauromaquia aumenta cada año, siendo la más reciente de un 78%” (YouGov, 2018).
En un país sumido en una crisis social y económica generada por la pandemia de COVID-19, con déficit en la atención primaria, donde muchas PYMES siguen esperando ayudas, donde ya hay 4 millones de parados y donde el sector cultural agoniza, España sigue destinando más de 500 millones de euros al año a mantener viva la tauromaquia en total sumando las procedentes de Europa y España.
Invertir en tauromaquia es como invertir en máquinas de escribir y malgastar los fondos públicos. Esa cantidad de dinero podría ser destinada a crear puestos de trabajo en otras áreas, como la verdadera cultura o la conservación de la naturaleza, incluyendo las dehesas y los animales que en ellas viven, como el toro.
En ANDA, llevamos más de treinta años luchando contra las subvenciones que recibe la tauromaquia e informando la verdad sobre las corridas de toros para promover una conciencia colectiva que acabe con la mal llamada “fiesta nacional” y su consecuencia que son los festejos taurinos que se siguen practicando en muchos pueblos de España. Festejos crueles donde se maltratan animales, maltrato animal legalizado.
Seguimos en la lucha, cada vez somos más los que rechazamos esta aberración y la tauromaquia cada día tiene menos adeptos.
Si alguien sufre, no es una fiesta.