En Coria (Cáceres,) este municipio del norte de Extremadura celebra las fiestas de San Juan que durarán hasta el 28 de junio. Cada día 2 toros, uno durante el día, y otro por la noche correrán por las calles hasta quedar exhaustos.
Víctimas inocentes de unas fiestas patronales arcaicas.
Un año más, los toros recorren diversas calles de la localidad hasta llegar a la Plaza Mayor, donde se produce una lidia popular y después el animal recorre diversas calles del casco antiguo. Los toros corren durante hora y media por el recinto amurallado de la ciudad antigua y se les da muerte con un disparo de escopeta ante la presencia del público que está presente en el lugar. Este festejo es también uno de los más horribles y angustiantes para los animales ya que limita sus movimientos por mucho más tiempo. El sufrimiento se acentúa en este tipo de festejos por el gran cansancio físico que van acumulando, al ser llevados hasta los límites de su capacidad. En todos los festejos se puede apreciar cómo, al poco tiempo de empezar, los animales recurren a la respiración abdominal con la boca abierta, la lengua fuera y una profusa salivación.
ORIGEN DE LAS FIESTAS.
A partir del siglo V comenzaron a hacer coincidir esta festividad con San Juan, aunque ya siglos antes se hacía alrededor de esa fecha.
En el siglo XIII se realizaba un traslado a caballo de los toros desde fuera de la ciudad hasta dentro del casco urbano, donde aprovechaban los mozos de la tierra para poder correr delante de los animales por sus calles.
En el siglo XVI se empiezan a celebrar los festejos en la Plaza Mayor, aunque se mantenía la tradición de correr delante de las reses por el recinto enmurallado que rodeaba el casco urbano.
En 1593 se prohibió el hecho de correr los toros en espacios cerrados, y no fue hasta 1606 que se levantó dicha prohibición, permitiendo continuar con estos tradicionales festejos.
En el año 1970 fue declarado de interés turístico provincial y más tarde nacional.
En 2013 la Junta de Extremadura declaró los San Juanes como «Festejos taurinos populares tradicionales«.
En 2020 esta fiesta recibió un reconocimiento por parte de la localidad de Betxi (Castellón).
Dar muerte a animales en público está prohibido por: Reglamento de Festejos Taurinos Populares de Extremadura.
Así, en el artículo 5 de dicha norma se indica la prohibición de festejos que impliquen cualquier tipo de maltrato al animal. De igual manera, el artículo 28 recoge que la muerte de las reses se realizará «sin presencia de público»
Seguiremos luchando para que de una vez por todas la tauromaquia y estos festejos que están subvencionados con dinero público formen parte de nuestra historia. Sabemos de tradiciones en todo el mundo que han debido y deben ser eliminadas, porque conllevan víctimas, si las tradiciones se hubieran mantenido siempre intactas, la humanidad nunca hubiese evolucionado.
Uno de los aspectos más dañinos para la sociedad es la frecuente presencia de menores en este tipo de festejos taurinos.
Desde ANDA hemos estado muchas veces en Coria y hemos podido presenciar de primera mano cómo se desarrollan estos cruentos encierros y todo el sufrimiento que se les causa a los animales, por supuesto, denunciándolo todas y cada una de las veces.
Las personas tienen que evolucionar y nuestros políticos tienen que aceptar lo que reclama la gran mayoría de la sociedad española, NO AL MALTRATO ANIMAL LEGALIZADO. Afortunadamente, cada vez somos más los que no queremos que se utilicen y maltraten a los animales es este tipo de espectáculos tan cruentos que están subvencionados con el dinero de nuestros impuestos.
CUANDO UN SER VIVO SUFRE, NO ES UNA FIESTA.
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