En 2019 se cumplieron treinta años de la fundación de ANDA. Echando la vista atrás se percibe el cambio tan impresionante que se ha producido en la sociedad española en el respeto y consideración por los animales. Queremos creer que nuestra asociación ha desempeñado un papel importante en esta evolución dado que esa era nuestra vocación y nuestro propósito desde el primer día.
Cuando nos planteamos crear un movimiento nuevo en España todos proveníamos del proteccionismo tradicional, dedicado a la recogida y cuidado de los perros y gatos abandonados que abundaban por las calles y cunetas que las pocas sociedades protectoras existentes no podían atender. Estaba claro que aquella situación nunca tendría fin ni nadie tenía medios para solucionarlo. Había que dirigirse a las raíces del problema: haciendo campañas de concienciación sobre el sufrimiento de los animales abandonados, la proliferación excesiva, la ignorancia sobre el trato y los cuidados que necesitan los animales que viven con nosotros y la crueldad que supone tenerlos en malas condiciones o abandonarlos.
Lógicamente lo primero que había que hacer era promover la creación de sociedades protectoras locales por toda España que, aparte de su labor diaria, nos ayudaran a difundir nuestras ideas. Para ello se dieron cursillos gratuitos a cargo de las más importantes sociedades europeas (RSPCA y WSPA inglesas) que tenían una larga experiencia. Resultaba muy emocionante comprobar que venían de toda España, incluidas las Islas, y que todos acababan convencidos de la necesidad de cambiar la mentalidad española hacia los animales. Ésta fue una de las campañas de las que más satisfechos y orgullosos nos sentimos y pudimos comprobar que en pocos años todo el territorio español se cubrió de refugios de protectoras con las que, afortunadamente, seguimos colaborando cuanto podemos, como por ejemplo participando en las manifestaciones que se organizan, tanto anti taurinas, como anti caza, abandono, etc.
A través de nuestros contactos con las sociedades extranjeras, muchos miembros del Eurogrupo para la protección animal de Bruselas, nos fuimos concienciando de los sufrimientos de los otros animales: vacas, gallinas, cerdos, caballos, animales de experimentación que es uno de los casos más sangrantes en la utilización de animales, muchas veces sin necesidad ni utilidad ninguna.
A la vez nos ocupamos de algo típicamente español y que resultaba no sólo vergonzoso sino espeluznante por la crueldad y ensañamiento: las fiestas populares que al parecer todo el mundo encontraba naturales e incluso había quien las defendía como tradicionales y parte de nuestra cultura. Para nosotros fue un aldabonazo que nos hizo dedicar nuestros principales esfuerzos a dar a conocer al público lo que se hacía a los animales en las fiestas de los pueblos: el burro de Pero Palo que se reventaba en Villanueva de la Vera, los toros acribillados con dardos en Coria, el toro de Tordesillas que ahora todo el mundo conoce, la cabra que se tiraba del campanario en Manganeses (Zamora) los terribles toros con los cuernos ardiendo, los gallos y gansos a los que se arrancaba la cabeza, o las piñatas con gatos y ardillas metidas en cuencos de barro y destrozados a palos, por cierto muy cerca de Madrid….. Se publicaron grandes anuncios en los principales periódicos y podemos presumir de que gracias a ANDA la mayoría de ellos ya han sido modificados y prohibidos, aunque todavía quedan algunos que esperamos sean rechazados más pronto que tarde por la misma gente como ya ocurre en varios pueblos. También quedan por eliminar las terribles becerradas pueblerinas que tanto defiende el mundo taurino como forma de fomentar la afición a las corridas de toros que, por cierto, también están de capa caída y si no fuera por los intereses económicos y las subvenciones que reciben tendrían los días contados, o al menos eso es lo que ya está pasando en muchos pueblos. También fuimos los primeros en denunciar el terrible trato que sufren los perros de los cazadores, especialmente los galgos, publicando las fotografías de los galgos ahorcados que causaron un gran escándalo en todo el país.
Sin descuidar estas campañas habituales empezamos a participar en las campañas europeas para conseguir un mayor respeto y buen trato para los animales de granja que, aunque hasta hacía poco tiempo eran los grandes olvidados, hay que tener en cuenta que se trata de muchos, muchos millones y que su sufrimiento puede ser evitado o reducido al mínimo. Hemos visitado mercados y mataderos, seguido transportes de animales a los mataderos y también para exportación a terceros países en viajes interminables en todos los climas y sin la más mínima atención a su situación y cuidados mínimos. Esta es una actividad que nos ocupa gran parte de nuestro tiempo y esfuerzo y nos hace sufrir de impotencia al no poder contar con más medios.
Otras campañas puntuales, a veces españolas y otras a la vez que en Europa han sido contra el uso de pieles que ha sido todo un éxito, la compra-venta de animales exóticos todavía en curso dada la cantidad ingente de dinero que mueve, el tráfico de marfil que está acabando con los elefantes y del que España es bastante responsable por su situación geográfica y la inacción de nuestras autoridades.
Mención aparte merecen nuestras alianzas con otras asociaciones nacionales y extranjeras con las que colaboramos estrechamente y que han dado lugar a la formación de coaliciones que están dando magníficos resultados como InfoZoos, InfoCircos, SOSDelfines y REMA la Red de Métodos Alternativos a la experimentación con animales de la que ANDA ha sido nombrada para su Secretariado.
Fuimos la asociación declarada Colaboradora de la Comunidad de Madrid con el nº 1 y podríamos haber accedido a subvenciones si nos hubiéramos limitado a la protección de perros y gatos en vez de ocuparnos de los demás animales como toros, de peletería, tráfico de especies exóticas, circos, caza, granjas, etc. Sobre todo insistiendo en la educación, a la que dedicamos grandes esfuerzos personales y económicos, siempre sin perder de vista la consecución de leyes de protección animal contando con el ejemplo de las existentes en Europa y con el apoyo que se nos prestó desde el Parlamento Europeo a través del Eurogrupo.
Todo ello ha sido posible gracias a las aportaciones de los fundadores de la asociación y sucesivamente a las cuotas y legados testamentarios de nuestros socios que, podemos sentirnos orgullosos, siempre han creído en la gran labor de ANDA y los muchos éxitos conseguidos durante estos años. No hace falta resaltar que si muchas más personas preocupadas por los animales se sumaran a ANDA lógicamente nuestras campañas podrían ser más intensas y efectivas.
Hacemos un llamamiento a todas aquellas personas conscientes de la gran tarea que tenemos pendiente y de que sólo una asociación bien organizada, extraordinariamente motivada y trabajadora como ANDA puede seguir avanzando sin radicalismos ni estridencias. Obviamente necesitamos cuanto más apoyo de la sociedad mejor. Les pedimos consideren colaborar haciéndose socio aunque sea con una modesta cuota que, si somos muchos, conseguiremos grandes avances.
Ayúdanos a cambiar el mundo para los animales. Gracias a la colaboración de nuestros socios podemos seguir trabajando por el bienestar animal y ayudar a los animales. También gracias a teaming puedes apoyar el trabajo de ANDA, puedes acceder desde nuestra página web. Tu ayuda es necesaria para seguir trabajando por los animales.
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